Volver a nacer

Esta es una de esas historias que ponen cara al espíritu de compañerismo que reina en la montaña. Todo estaba preparado para una magnífica carrera hace 15 días en Orozko. Más de 120 corredores calentaban y tomaban posiciones en la salida para participar en una exigente pero popular cita de más de 27 kilómetros y un desnivel acumulado de 1.835 metros. Pero algo truncó lo que prometía ser una jornada para disfrutar. Pablo, uno de los corredores, cayó desplomado al suelo. “La gente que estaba a su alrededor empezó a pedir auxilio y me acerqué para ver qué ocurría“, recuerda Julen Unzueta, otro aficionado a las carreras de montaña y, por suerte para Pablo, médico de profesión. El corredor estaba inconsciente, sin pulso, una situación en la que una intervención a tiempo marca la diferencia. Julen, que trabaja en el Igualatorio Médico Quirúrgico, le practicó una reanimación cardio-pulmonar durante 12 minutos, hasta que llegó la ambulancia que le trasladó al hospital. http://www.deia.com/

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